Viajes a Bolivia

Sin duda, estamos ante una de las perlas mundiales para los amantes de organizar viajes por libre y de manera independiente. La seguridad es razonable, los precios bajos y los atractivos del país innegables. Entre ellos, se cuentan una fuerte cultura indígena, un importante patrimonio arqueológico y magníficas posibilidades para ver fauna en estado salvaje en los boscosos llanos orientales. Realizar viajes a Bolivia que recorran todos los puntos de interés del país será complicado por sus grandes distancias pero, sin embargo, constituirá una de las mejores experiencias que puede llevarse cualquier viajero de todo América Latina.

Cabe destacar que Bolivia es el más montañoso de los estados de América y su capital administrativa, La Paz, tiene el honor de ser la más alta del planeta. Situada a una altitud que oscila entre los 3.000 y los 4.000 msnm, muchos la denominan "la ciudad que toca el cielo". De hecho, algunas personas no encajan demasiado bien los efectos del "mal de alturas", conocido aquí como Sorojchi. El mejor remedio en los viajes a Bolivia será, por lo general, no forzar la máquina y dedicar los primeros compases del viaje a la aclimatación.

Como contrapunto, teniendo en cuenta que es uno de los países más pobres de Latinoamérica, las condiciones sanitarias no son muy buenas. Es conveniente también ir con cuidado al visitar las ciudades más importantes, como la propia capital o Sucre. Aunque no son tan peligrosas como otras ciudades del continente, conviene extremar las precauciones durante el viaje para evitar problemas. En definitiva, el mayor riesgo será emprender viajes a Bolivia sin disfrutar de sus muchos, y algunos únicos en el mundo, atractivos: el Salar de Uyuni, la ciudad de Potosí, el parque nacional de Madidi o los pintorescos y coloridos mercados de las localidades más representativas perpetuarán en la memoria del viajero un recuerdo que difícilmente podrá borrarse jamás.