¿Qué ver en Azores?

Lo que tienes que hacer y ver en Azores

• Aunque son nueve las islas que conforman las Azores y, por tanto, muchos los lugares en este destino que merece la pena visitar, uno de los rincones preferidos por los viajeros es el municipio de Praia de Vitória, ubicado en la Isla Terceira. Más allá del encanto de su playa, cuyo arenal es el más extenso de todo el archipiélago, es casi obligatorio adentrarse por su casco histórico, donde predominan las empinadas calles empedradas, un laberíntico paseo con el que dejarse sorprender por la arquitectura tradicional de la zona.

• Cerca de Praia de Vitória encontramos otra localidad, Angra do Heroísmo, convertida en uno de los principales atractivos turísticos de las Azores. La capital de la Isla Terceira posee un casco antiguo renacentista que evidencia la importancia histórica de la ciudad, caracterizada por ser un destacado lugar de paso de comerciantes en su ruta a las Américas. Además del centro histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, vale la pena visitar fortificaciones como la de São Sebastião y São João Baptista, fantásticos ejemplos de la arquitectura militar portuguesa del siglo XVI.

• Dejando la Isla Terceira atrás, otro de los territorios que más atractivos brinda al viajero es el que forma la Isla de São Miguel, donde prevalecen, por encima de cualquier monumento moldeado a manos del ser humano, los creados única y exclusivamente por la caprichosa naturaleza del lugar. De entre todos ellos destaca la impresionante Caldera de las Siete Ciudades, un escenario de verdes laderas escarpadas y dos lagunas, la Azul y la Verde, con aguas de diferente coloración. De hecho, según varias leyendas locales estas diferentes tonalidades provienen de una relación imposible de amor entre una princesa y un pastor, quienes llorando formaron una laguna de aguas idénticas al color de sus ojos.

• La segunda mayor isla de las Azores tras São Miguel es la isla del Pico, espacio donde se encuentra la cumbre más alta de Portugal, de ahí su nombre. Para los amantes de la escalada una de las actividades con la que más disfrutan es la subida a la Montaña del Pico, de 2531 metros. Este paraje es también un extenso parque natural con un gran número de senderos bien señalizados, un territorio impregnado de una exuberante naturaleza que atrapa a todo aquél que la visita.

• Y para los apasionados de los récords, no hay mejor lugar en las Azores que el islote de Monchique, el verdadero punto más occidental de Europa. Alejada hoy día del turismo de masas, este islote funcionaba como referencia para los navegantes que surcaban las Azores a bordo de sus precarios galeones, siendo uno de los distintivos del archipiélago para los marineros en su larga travesía por el Atlántico. Accesible sólo por barco, este islote se caracteriza por su rica biodiversidad, además de por sus espectaculares fondos marinos en los que es posible practicar el buceo. Como punto más occidental de Europa, el islote de Monchique es también uno de los rincones de las Azores desde el que mejores puestas de sol se contemplan.