¿Qué ver en Tanzania?

Lo que tienes que hacer y ver en Tanzania

• Realizar alguno de los mejores safaris de Tanzania (y de toda África) como los del Ngorongoro y el Serengeti en el norte o Ruaha y Selous en el sur. Todos merecen la pena, aunque si el viajero va justo de tiempo debe inclinarse por una única zona.

• "Bucear en Zanzíbar" (http://www.buscounviaje.com/blog/ideas-viaje/bucear-en-zanzibar-tanzania/) entre tortugas marinas, delfines, corales y miles de especies de peces de todos los colores y formas, es una experiencia única que permite un viaje a Tanzania.

• Escalar el Kilimanjaro, junto a la frontera entre Kenia y Tanzania. El lugar ofrece paisajes sobrecogedores y nos hace sentir explorador y alpinista al mismo tiempo.

• Recorrer la ciudad de piedra, Stone Town, capital de Zanzíbar. Perderse por sus callejuelas y mercados y disfrutar de la mezcla de culturas y razas que la caracteriza. No pierdas la oportunidad de charlar con su gente.

• A pesar de que se ha perdido gran parte del bosque primario original, las montañas Usambara (en el noreste de Tanzania) son un magnífico lugar para dar suaves paseos, disfrutar de un clima más fresco y visitar pintorescas aldeas.

• Las islas de Pemba y Mafia, que forman parte del archipiélago de Zanzibar, son otro destino destacado de Tanzania. Además de sus extensas playas de arena blanca y la poca afluencia de visitantes, Pemba es un destino excelente para la práctica de submarinismo, mientras que Mafia (un parque marino) ofrece la posibilidad de nadar con tiburón ballena.

• Descubrir las ruinas de Kilwa Kisiwani en la parte sur de la costa de Tanzania. El viajero encontrará los impresionantes vestigios de dos puertos comerciales y ciudades árabes que entre los siglos XI al XV fueron un importante centro del tráfico de mercancías en esta parte del mundo.

• Navegar, a bordo del ferry MV Liemba, por el Lago Tanaganyika.

• Visitar el parque nacional Gombe Stream, el santuario de las últimas familias de chimpancés salvajes de Tanzania y el centro de investigación establecido en 1965 por la primatóloga Jane Goodall. El único acceso al parque es navegando por el Lago Tanganyika desde Kigoma.

• Entre los parques y reservas nacionales al sur de Tanzania, vale la pena dedicar unas jornadas a visitar la Reserva de Selous y el parque nacional Ruaha, donde además de excelentes safaris en vehículo se puden hacer safaris a pie y en barca (por el río Rufiji), dos actividades que no están permitidas en los parques del norte.

• Recorrer el altiplano de Tanzania, las montañas Uluguru y el parque nacional de Udzala. La región ofrece una oportunidad única de contemplar maravillosos paisajes de verde frondoso, colinas, ríos, cascadas y plantaciones de té. Tanzania no es solamente sabana.

• Descansar en las playas de Zanzíbar: tumbarse en una hamaca, recorrer sus kilómetros de arena blanca rodeada por aguas cristalinas del Índico en marea baja, o darte un buen baño cuando ésta suba. És el final perfecto para un previo de caminatas.

• Casi la mitad del inmenso Lago Victoria está en territorio de Tanzania. Un paseo en canoas por el lago (desde la población de Musoma) nos sumergirá en la vida cotidiana de las poblaciones locales de pescadores.

• Interesarse por la cultura y formas de vida de las tribus Datoga y Hadzabe en Lago Eyasi. Estas dos etnias han vivido aquí desde hace 10.000 años. Los Datoga, son herreros de origen nilótico y los Hadzabe, recolectores-cazadores de origen bosquimano. El acceso es complicado y hay que informarse del estado de la pista y contratar un guía local para realizar las visitas.

• Hacer un trekking en los alrededores del Oldonyio Lengai, la montaña sagrada de los Masaai (el único volcán activo de África Oriental) a orillas del sódico Lago Natrón, y conocer la auténtica cultura Masaai. Una experiencia genuina para verdaderos aventureros.

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