Viajes a Península de Kamchatka

Sin duda, uno de esos destinos que satisfarán las ansias de aventura de cualquier viajero. La Península de Kamchatka, situada en el Extremo Oriente Ruso, es uno de los muchos lugares de Rusia que todavía conserva ese carácter de última frontera inexplorada, y con razón. Para empezar, pese a sus grandes dimensiones (casi 500.000 kilómetros cuadrados), a duras penas alberga al mismo número de personas. Que cada uno haga sus propios cálculos de densidad de población. Además de por sus paisajes y su vida salvaje, la Península de Kamchatka es famosa por su enorme actividad volcánica, con nada menos que 160 conos (una treintena de ellos activos) elevándose sobre la inacabable tundra ártica de su territorio. Los escenarios que los volcanes generan son absolutamente impresionantes y pondrán los dientes largos a cualquier amante de los grandes trekkings que se precie, aunque quien busque en Kamchatka algo más que naturaleza en todo su esplendor errará el tiro con este destino: la tierra impone aquí su ley y no deja espacio para casi nada más. Ahora bien, los amantes del ecoturismo, de la montaña y de la observación de animales (los osos, los cetáceos y una enorme variedad de aves campan aquí a sus anchas) hallarán en la península rusa un auténtico paraíso del que les costará partir. Para unos y otros se recomienda tener en cuenta que el viaje a la Península de Kamchatka presenta ciertas exigencias, tanto en lo referente a equipo como en lo tocante a capacidad física del viajero, y que estamos ante un destino sumamente lejano que no resulta nada fácil de alcanzar.