Uno de los viajes por el sur de África que despierta mayor interés en tres rincones espectaculares: la rica vida salvaje del delta del Okavango (en Botswana), combinado con las espectaculares cataratas Victoria (una de las 7 maravillas naturales del mundo) y Namibia, hogar de fauna salvaje, paisajes únicos, espacios sagrados y tribus ancestrales.
La ruta se inicia en Namibia, un joven estado cargado de historia (merece la pena conocer su pasado germánico reflejado en algunas construcciones como Swakopmund), desiertos (Namib) o el Parque Nacional de Etosha. Este viaje prosigue por el vecino estado de Botswana, puertas del África más salvaje, y ejemplificado en el Delta del Okavango, uno de los mejores lugares para ver animales en su hábitat natural. Como punto culminante, las famosas Victoria Falls, entre Zambia y Zimbabwe, cuyo magnetismo va más allá de sus 108 metros de caída libre o los 1,7 kilómetros de anchura. Una propuesta para soñar con el África más salvaje tras las huellas del Okavango.