Un viaje entre el mar, la piedra y los sabores del sur de Italia
Día 1 — Hacia el norte salvaje
Aterrizas en Bari y, tras recoger el coche, emprendes ruta hacia el norte, al promontorio del Gargano. De camino, Trani te da la bienvenida con su majestuosa catedral blanca frente al mar, uno de los rincones más fotogénicos de la costa adriática. Por la tarde llegas a tu agroturismo, rodeado de olivos, donde descansarás bajo el silencio de la campiña.
Día 2 — Vieste y el mar turquesa del Gargano
Hoy el mar es protagonista. Una excursión en barco (opcional) te lleva a descubrir grutas escondidas y acantilados blancos esculpidos por el tiempo. Por la tarde, Vieste te espera con sus callejuelas de sabor medieval y vistas al Adriático que cortan el aliento.
Día 3 — Islas Tremiti y cena sobre el mar
Zarpas hacia las islas Tremiti, un pequeño archipiélago virgen (excursión opcional), ideal para nadar en aguas cristalinas o caminar entre pinos y ruinas. De vuelta al continente, la noche se cierra con una cena especial en un trabucco, una antigua estructura de pesca suspendida sobre el mar. Un lugar donde el tiempo parece haberse detenido.
Día 4 — De los acantilados al tufo dorado de Matera
Abandonas el Gargano y pones rumbo a Matera, cruzando lentamente hacia Basilicata. Esta ciudad de piedra te recibe como un sueño suspendido en el tiempo. Tras el check-in en tu B&B, empiezas a explorar sus famosos Sassi, los antiguos barrios excavados en la roca. Aquí cada paso es historia viva.
Día 5 — Cuevas, cañones y cultura rupestre
Hoy te adentras aún más en la historia: una caminata (opcional) por el cañón que rodea Matera te lleva a descubrir iglesias rupestres escondidas entre la vegetación. Por la tarde, puedes seguir explorando la ciudad o escaparte a la costa para un baño en Metaponto.
Día 6 — Rumbo al sur: empieza el Salento
Sales de Matera en dirección al corazón del tacón de Italia. En el camino, Taranto te ofrece una pausa cultural con su castillo o museo arqueológico. Más tarde, primer baño en las Maldivas del Salento, con arena blanca y aguas turquesas. Llegada a Lecce y paseo nocturno entre sus fachadas doradas: no es casual que la llamen la “Florencia del Sur”.
Día 7 — Doble mar, doble belleza
Por la mañana eliges entre las playas del Jónico o del Adriático: Torre dell’Orso, Porto Cesareo... imposible fallar. Por la tarde, visitas Otranto, un pueblo amurallado con sabor oriental y vistas de postal.
Día 8 — Pueblos con alma y playas secretas
Hoy puedes seguir explorando calas escondidas o descubrir los tesoros del interior. Gallipoli, Presicce, Galatina, Specchia... cada uno guarda una historia y una plaza donde el tiempo se detiene. Tú eliges el ritmo.
Día 9 — Hacia el corazón de Puglia: el Valle de Itria
Dejas el Salento atrás y te diriges al verde Valle de Itria. De camino, Brindisi te ofrece un almuerzo de pescado fresco con vistas al puerto. Por la tarde llegas a tu nuevo agroturismo y descubres Ceglie Messapica, un paraíso gastronómico donde cada cena es una celebración.
Día 10 — Postales en blanco y verde
Por la mañana, te pierdes entre las casas encaladas de Ostuni, la “ciudad blanca”. Luego, Cisternino, pequeño pero encantador, te acoge con sus callejones y aromas a carne a la brasa.
Día 11 — Trullos y elegancia
Alberobello, con sus trullos de cuento, te espera para una mañana inolvidable. Por la tarde, Martina Franca sorprende con su elegancia barroca y plazas llenas de vida.
Día 12 — Cuevas, mar y zoológicos
Hoy puedes explorar las cuevas kársticas de Castellana Grotte o visitar Monopoli, encantador pueblo costero. Si viajas con niños (o te hace ilusión), el zoo-safari de Fasano puede ser una parada divertida.
Día 13 — El gran final: Bari y Polignano
Te despides del Valle de Itria con una última parada en Polignano a Mare, con su mar azul profundo y balcones llenos de poesía. Entregas el coche en Bari y te instalas para disfrutar de la ciudad vieja, sus murallas, iglesias y calles llenas de vida.
Día 14 — Pasta casera y despedida
Hoy visitas los mercados de Bari, pruebas su comida callejera y participas (si quieres) en un almuerzo con anfitriones locales que te enseñarán cómo hacer las auténticas orecchiette. Una despedida con sabor a casa.
Día 15 — Arrivederci!
Tras el desayuno, traslado al aeropuerto. Te llevas contigo sabores, paisajes y momentos difíciles de olvidar.