Ciudad del Cabo está situada en uno de los mplazamientos más espectaculares del mundo. Su clima templado tanto en verano como en invierno y su abanico de actividades a su alrededor (observación de pingüinos, ballenas, parques naturales, rutas vinícolas) la convierte en un destino único. Si lo complementamos con unos días en la ruta Jardín, la carretera que recorre la costa y que te permite observar numerosas reservas de animales (como el parque de los elefantes Addo) y de paisajes increíbles, esta primera aproximación a Sudáfrica puede convertirse en una experiencia fantástica. Como colofón, la visita de uno de los parques más envidiados y grandes del mundo: El Parque Nacional Kruger, los parajes naturales que rodean el río Blyde y una estancia en la monarquía de Suazilandia